Mario Steta, Vicepresidente y Director General de Driscoll’s para América Latina.
A pesar del COVID-19, el esencial sector de los berries, así como gran parte de la industria agroalimentaria, mantuvo su actividad en México. Las restricciones en la frontera con Estados Unidos, la pérdida temporal de parte de la mano de obra, el cierre del canal Food Service (HORECA), el incremento de los costos de producción y la adaptación a la nueva situación por parte de los empleados, ha sido un reto para la productora y comercializadora de berries Driscoll’s México, que a pesar de todo sigue siendo la filial de esta multinacional con mayor crecimiento en los últimos años.
“En lo más esencial, diría que no ha habido un impacto importante en la actividad productora de berries, a excepción de la orgánica, que sí se vio afectada en volúmenes y en el diferencial de precio durante las últimas semanas. El reto estructural más fuerte es el comprender la repercusión de mediano y largo plazo en los patrones de consumo de los mercados a los que exportamos. Ejemplo de ello es el canal de food service, que se detuvo por completo y al momento no ha vuelto a superar el 25-30% de su actividad habitual, sin embargo, el vacío que dejó en los mercados fue compensado, en su momento, por la demanda de las grandes cadenas de distribución”, explica Mario Steta, Vicepresidente y Director General de Driscoll’s para América Latina. “Tras un periodo de fuerte inestabilidad, los patrones de consumo han ido estabilizándose hasta encontrarse en niveles no muy lejos de los habituales, aunque la forma en que se distribuyen los alimentos está teniendo y tendrá un cambio de fondo, particularmente por el impacto de las ventas en línea”.
Aunque el sector hortofrutícola tiene un fuerte compromiso y gran experiencia en materia de inocuidad, se han tenido que llevar a cabo modificaciones en los protocolos, lo que en algunos casos no sido fácil culturalmente, en México. “Además de las medidas de higiene que incluyen el uso de mascarillas, guantes y geles sanitizantes, hemos tenido que reestructurar las instalaciones en las centrales de empaque para asegurar que se mantenga la distancia de seguridad entre los trabajadores. Los criterios en campo no han sido tan difíciles de implementar, aunque culturalmente ha sido un reto hacer que la gente entienda las limitaciones para ocupar con menor número de pasajeros los autotransportes que se desplazan de las comunidades a los campos, la toma de temperatura, así como la prohibición de compartir utensilios de cocina, entre otras medidas. Desafortunadamente el gobierno federal, empezando por el propio Presidente Lopez Obrador, generó mensajes contradictorios al no dar relevancia a la pandemia en un inicio, o no apoyar la implementación de medidas de prevención”, manifiesta Mario Steta. “Para nosotros ha sido primordial cuidar la salud de nuestra gente, en todo el proceso productivo, así como en los campamentos y albergues”.
Irremediablemente, los costos de producción se han incrementado. “La pregunta es, ¿quién asumirá esto? ¿Nosotros? ¿El consumidor? ¿La gran distribución? Todavía no lo terminamos de entender. De algún modo, se va a tener que repartir en toda la cadena de valor, incluyendo la gran distribución. Mientras tanto, seguiremos mejorando la eficiencia en nuestra forma de producir los berries”.
México sigue siendo el origen con mayor crecimiento para Driscoll’s
En términos de dimensión de negocio, México representa crecimiento más importante para Driscoll’s en los últimos años. Y es que, las condiciones especiales que reúne el altiplano de México permiten producir casi todo el año. Driscoll’s México cuenta con más de 400 productores y emplea a alrededor de 60.000 trabajadores.
La fresa, por volumen, es la berry más importante de Driscoll’s México, muy seguido por la frambuesa, mientras que la zarzamora ha venido ganando mucho terreno tanto en producción como en valor. «Para nosotros, el arándano tiene un reto interesante en productividad, considerando que Perú ha ganado mucha presencia en los mercados internacionales. No obstante, Driscoll’s cuenta con un modelo de obtención de variedades propias, con una conexión directa entre productor y mercado, algo que se refleja de forma notable en el consumo”, explica Mario Steta.
Driscoll’s México exporta el 90% de su producción, que se dirige a más de 40 países, siendo Estados Unidos y Canadá los principales mercados. De acuerdo con Mario Steta, esta filial de Driscoll’s es la que más crecimiento está experimentando en los últimos años. “Incluso México, como mercado de consumo de berries para esta compañía, que se ubica en el puesto número 7 del ranking, podría llegar a escalar al número 4-5 de mercado. Su potencial de consumo es muy grande a futuro”.
“Lo cierto es que México ha mejorado mucho en su cadena de suministro, implementando nuevos sistemas de producción y mejorando en su conectividad aérea hacia Europa y Asia, con cinco o seis programas de carga diarios a estos destinos. Vamos a seguir en esta línea porque se trata de destinos con cada vez mayor crecimiento para nosotros. En Europa competimos fuertemente con Sudáfrica y Marruecos y en Asia, principalmente con Perú y Chile, que en el caso del mercado chino, entran sin arancel. También Perú y Chile suponen una gran competencia en los mercados norteamericanos. No obstante, mientras que Perú ha apostado por ganar cuota de mercado mediante grandes volúmenes y precios agresivos, México se posiciona cada vez más como un jugador de calidad y consistente en las entregas, lo cual nos está haciendo más competitivos”, asegura el representante de Driscoll’s para América Latina.
La falta de mano de obra, uno de los principales retos para seguir creciendo
“A pesar de la crisis del coronavirus y de no tener las mejores políticas para el incremento de la inversión por los recortes en presupuestos para agricultura, seguimos creciendo. El sector agrícola es el segundo generador de divisas en México, en el que se emplean entre 6 y 7 millones de personas. Sin embargo, a largo plazo la escasez de empleados es uno de nuestros principales retos. Hay cierta percepción de que en México hay mucha disponibilidad de mano de obra, pero esto ha cambiado significativamente en los últimos años».
«Las zonas con más producción están sufriendo una falta importante de trabajadores, incluso en el sur del país, de donde procede una gran parte de trabajadores temporales. Sin embargo, desde finales de abril, hemos visto cómo la pandemia ha impactado en la economía de México, lo que ha causado que mucha gente, al no tener ocupación laboral, se haya volcado a la agricultura. Ahora tenemos la oportunidad de demostrar que el campo es una buena alternativa laboral y no un recurso ocasional de emergencia. Podemos demostrar ahora que el campo cuenta con buena remuneración y buenas condiciones de trabajo. Tenemos empresas muy profesionales y comprometidas con los trabajadores, aunque no se ha dado mucho a conocer”, concluye Mario Steta.
Fuente:
Freshplaza.es
Muy bien por el señor Mario Esteta gran impulsor de las Berrys
Y gran conocedor del tema gracias señor por su apoyo y experiencia